Desayuno ligero con chía y avena
Llega el verano y, con el calor, nos apetece más desayunar algo ligero, fresquito y que se fácil de preparar. Este desayuno es una muy buena opción para salir de casa saciadas, con una fácil digestión y nutridas.
A mí me gusta prepararlo la noche antes, porque así le doy tiempo a la chía y a la avena para que se hinchen naturalmente, sin tener que hervir ni calentar el agua o leche. Una vez preparado, lo pongo dentro de la nevera y me olvido hasta el día siguiente. Incluso, si preparo de más, este desayuno dura varios días en la nevera por lo que me puede servir para más días. Una forma muy sencilla de batch cooking que nos puede solucionar los desayunos de media semana.
Este desayuno no tiene gluten (yo suelo usar copos de avena certificados sin gluten), no tiene lácteos, ni azúcar añadido. Es totalmente vegano y cruelty free 🙂
Beneficios del desayuno con chía
Las semillas chía son un grano antiguo que se está volviendo muy popular en las dietas de hoy en día en muchos países.
Las semillas chía contienen una gran cantidad de proteína cruda, fibra dietética, antioxidantes derivados de compuestos fenólicos y ácidos grasos omega 3. El ácido graso omega 3 se ha asociado con una gran cantidad de funciones fisiológicas en el cuerpo humano. También muestra varios efectos beneficiosos para la salud debido a sus actividades antiinflamatorias, antioxidantes y cardioprotectoras.
También es una gran fuente de fibra dietética que es beneficiosa para el sistema digestivo y el control de la diabetes mellitus con una mayor concentración de ácidos grasos insaturados beneficiosos, proteínas sin gluten, vitaminas, minerales y otros compuestos fenólicos.
En un estudio de 2017, se demostró que consumir 7 o 14 g de semillas de chía con yogur natural a media mañana inducía a una mayor saciedad y menor ansiedad por comer durante el día.
Por qué la mezclamos con avena
La avena es un cereal completo y que nos equilibra por dentro. Es una muy buena fuente de minerales como en manganeso, magnesio, selenio, fósforo y hierro. Tienen también mucho calcio, y proporciona al cuerpo vitamina B1 y fibra. Su fibra es alta en beta-glucanos, que ayuda a bajar los niveles de colesterol del cuerpo y también los niveles de azúcar en sangre.
La mezcla hace que el desayuno sea más completo y saciante, lo que nos mantendrá sin hambre por más tiempo durante la mañana.
Ingredientes del desayuno con chía y avena
- 2 cucharadas de semillas de chía
- 2 cucharadas de copos de avena
- líquido (leche vegetal o agua, o una combinación de ambas) hasta cubrirlo todo y un poco más.
- Opcional: añadir fruta fresca el día siguiente (plátano, fresas, frambuesas, arándanos…)
Cómo se prepara
- Ponemos las dos cucharadas de semillas de chía y las dos cucharadas de copos de avena en un bol o vaso.
- Añadimos el líquido. Puede ser leche vegetal (avena, almendra o coco), agua o una mezcla de leche vegetal y agua. Cubrimos la chía y la avena con líquido, que tape la mezcla y un poco más.
- Removemos con una cuchara, dejamos reposar unos minutos, y volvemos a remover con la cuchara. Añadimos más líquido si consideramos que necesita más.
- Dejamos reposar en la nevera hasta el día siguiente.
Desayuno con chía y avena
Ingredientes
- 2 cucharadas semillas de chía
- 2 cucharadas copos de avena (los míos son sin gluten)
- Leche vegetal o agua hasta cubrir todo Leche de avena, de almendras sin azúcar o de coco
- Fruta fresca opcional
Elaboración paso a paso
- Ponemos las dos cucharadas de semillas de chía y las dos cucharadas de copos de avena en un bol o vaso.
- Añadimos el líquido. Puede ser leche vegetal (avena, almendra o coco), agua o una mezcla de leche vegetal y agua. Cubrimos la chía y la avena con líquido, que tape la mezcla y un poco más.
- Removemos con una cuchara, dejamos reposar unos minutos, y volvemos a remover con la cuchara.
- Añadimos más líquido si consideramos que necesita más.
- Dejamos reposar en la nevera hasta el día siguiente.