Cómo hacer la mejor crema de algarroba
La crema de algarroba es una alternativa a la crema de chocolate, muy nutritiva y que seguro que gusta a todos.
¿Qué es la algarroba?
La algarroba es el fruto del algarrobo, tiene origen mediterráneo y se lleva consumiendo en los últimos 4.000 años. Es un sustituto perfecto del cacao pero la algarroba no es tiene ningún componente estimulante. Tampoco requiere ningún endulzante porque ya tiene un toque dulce natural.
Su uso más común en la cocina es a través de la harina de algarroba, que se puede usar en platos donde se utiliza el cacao: helados, bizcochos, galletas y crema de algarroba, para untar panes y hacer bocadillos saludables.
Beneficios de la algarroba:
- Se le llama un fruto libre de grasas porque 100 gramos tiene menos de 1 gramo de grasa.
- Este fruto tiene mucha proteína.
- Es muy rico en fibra, concretamente rico en pectina.
- Sus principales minerales son el potasio y calcio (tiene el doble de calcio que el chocolate).
- Es una fuente excelente de vitamina A, B2, B3 y B6.
- Tiene mucho zinc y selenio.
¿Cómo usar la crema de algarroba?
La crema de algarroba se puede utilizar como cualquier crema de cacao o crema de chocolate.
Se trata de una crema saludable, sin azúcar, lo que la hace apta para toda la familia. Las cremas untables saludables cada vez son más demandadas, y aunque hay muchos tipos de cremas en el supermercado, éstas a veces contienen ingredientes insanos.
En este caso haremos crema de algarroba saludable con pocos ingredientes, todos saludables y que te nutrirán por dentro y se notará por fuera.
Por su textura cremosa, la crema de algarroba es perfecta para untar tostadas o pan, pero también se puede utilizar para acompañar fruta fresca, batidos, tortitas, gofres o crepes.
Receta de crema de algarroba
Ingredientes:
- 1 taza de anacardos crudos
- 4 cucharadas de algarroba en polvo
- 4 dátiles medjool en remojo
- 1/2 taza de leche de coco en lata
Procedimiento:
- Empezaremos quitando los huesos a los dátiles y los pondremos en remojo con agua tibia o caliente, mientras preparamos la crema de anacardos.
- Para la crema de anacardos, trituraremos en un procesador de alimentos o batidora de vaso los anacardos crudos sin remojar hasta que se conviertan en una pasta o crema de anacardos. Este proceso dura unos 5-10 minutos. Tenéis que ir con cuidado para no sobrecalentar el procesador de alimentos o la batidora. Podemos ir parando cada 2 minutos. Cuanto más trituréis, más cremosa será la crema.
- Cuando ya hayas conseguido la crema de anacardos o, en su defecto, anacardos triturados al máximo, es hora de escurrir los dátiles y añadirlos (sin el agua) al mismo procesador de alimentos. Antes de triturar, añadimos también la algarroba en polvo (unas 4 cucharadas es lo óptimo, pero puede modificarse según el gusto), y la media taza de leche de coco en lata.
- Trituramos todo junto durante varios minutos más hasta que está todo perfectamente integrado. Podemos ir jugando con el líquido, si queremos que sea más líquido, añadimos más leche de coco. Si queremos más intensidad de color, añadimos más algarroba en polvo.
Sustituciones:
- Algarroba: se puede cambiar por cacao, pero para ello tenéis la crema de Nutella saludable publicada aquí.
- Leche de coco: se puede cambiar por otra leche vegetal, pero esta dura más y le aporta una textura más cremosa. Recomiendo la leche de coco que proviene de una lata, intentando que sea ecológica y que solo tenga 2 ingredientes (coco o pulpa de coco + agua).
- Dátiles: no recomiendo cambiar los dátiles por otro endulzante ya que también le aportan textura. Pero pueden ser dátiles normales, sin ser Medjool. En este caso tendréis que utilizar el doble, 8.
- Anacardos: se pueden sustituir por avellanas tostadas, aunque el toque de anacardos queda genial con la algarroba. Los anacardos tienen que ser crudos, sin tostar y sin salar.
Espero que esta receta te haya gustado y la quieras hacer en casa.
Namasté 🙂
Crema de algarroba saludable
Equipment
- procesador de alimentos o batidora
Ingredientes
- 1 taza anacardos crudos
- 4 cucharadas algarroba en polvo o harina de algarroba, es lo mismo
- 4 dátiles Medjool u 8 dátiles normales
- 1/2 taza leche de coco de lata
Elaboración paso a paso
- Empezaremos quitando los huesos a los dátiles y los pondremos en remojo con agua tibia o caliente, mientras preparamos la crema de anacardos.
- Para la crema de anacardos, trituraremos en un procesador de alimentos o batidora de vaso los anacardos crudos sin remojar hasta que se conviertan en una pasta o crema de anacardos. Este proceso dura unos 5-10 minutos. Tenéis que ir con cuidado para no sobrecalentar el procesador de alimentos o la batidora. Podemos ir parando cada 2 minutos. Cuanto más trituréis, más cremosa será la crema.
- Cuando ya hayas conseguido la crema de anacardos o, en su defecto, anacardos triturados al máximo, es hora de escurrir los dátiles y añadirlos (sin el agua) al mismo procesador de alimentos. Antes de triturar, añadimos también la algarroba en polvo (unas 4 cucharadas es lo óptimo, pero puede modificarse según el gusto), y la media taza de leche de coco en lata.
- Trituramos todo junto durante varios minutos más hasta que está todo perfectamente integrado. Podemos ir jugando con el líquido, si queremos que sea más líquido, añadimos más leche de coco. Si queremos más intensidad de color, añadimos más algarroba en polvo.
Notas
- Algarroba: se puede cambiar por cacao, pero para ello tenéis la crema de Nutella saludable publicada aquí.
- Leche de coco: se puede cambiar por otra leche vegetal, pero esta dura más y le aporta una textura más cremosa. Recomiendo la leche de coco que proviene de una lata, intentando que sea ecológica y que solo tenga 2 ingredientes (coco o pulpa de coco + agua).
- Dátiles: no recomiendo cambiar los dátiles por otro endulzante ya que también le aportan textura. Pero pueden ser dátiles normales, sin ser Medjool. En este caso tendréis que utilizar el doble, 8.
- Anacardos: se pueden sustituir por avellanas tostadas, aunque el toque de anacardos queda genial con la algarroba. Los anacardos tienen que ser crudos, sin tostar y sin salar.