Kéfir: qué es y cuáles son sus principales beneficios
En este post vamos a descubrir qué es el kéfir y cuáles son sus principales beneficios y propiedades. Es un alimento que he introducido recientemente en mi día a día (antes lo tomaba más esporádicamente) y desde entonces he notado cambios muy significativos en mi salud.
¿Qué es el kéfir?
El kéfir es una bebida de leche cultivada y fermentada que tiene su origen en la región montañosa que divide Asia y Europa. Su nombre tiene su origen en la palabra turca keyif, que significa «sentirse bien» después de comer. Es muy parecido al yogur, pero suele tener una consistencia más líquida, lo que hace que se parezca más a una bebida que a un yogur.
Se hace tradicionalmente con leche de vaca o de cabra, pero en nuestros supermercados también encontramos kéfir con leche de oveja, que tiene un sabor menos fuerte.
Hablando de sabores, el kéfir tiene suele tener un sabor agridulce. Su sabor depende del tiempo de fermentación con el que haya sido creado. Es una excelente fuente de calcio y es rico en probióticos, que son las bacterias saludables que habitan en nuestro intestino.
Cómo se elabora
El kéfir se puede comprar en supermercados o se puede hacer en casa. Se elabora añadiendo granos de kéfir a la leche. Esos granos son el cultivo inicial que se utiliza para producir la bebida. Están formados por colonias similares a la levadura y por bacterias de ácido láctico. Estos granos se asemejan a una coliflor en apariencia.
Durante 24 horas, los microorganismos en los granos se multiplican y fermentan los azúcares de la leche, convirtiéndola en kéfir. Luego, se retiran los granos y se pueden volver a usar de nuevo.
Propiedades y beneficios del kéfir
Al igual que otros productos lácteos, el kéfir es una muy buena fuente de proteínas, calcio, fósforo, riboflavina, magnesio y vitamina B12. Además, contiene ácido pantoténico, biotina, selenio, zinc y potasio.
El interés por los beneficios para la salud de los alimentos lácteos cultivados (fermentados) se remonta a principios de 1900, cuando Elie Metchnikoff, en su libro La prolongación de la vida, asoció la ingesta de grandes cantidades de leche fermentada búlgara con una larga vida.
- Mayor tolerancia a la leche. Varios estudios han demostrado que la ingesta de kéfir mejora la digestión de lactosa en personas con niveles intestinales bajos de lactasa, la enzima necesaria para digerir la lactosa. El menor contenido de lactosa de algunos productos lácteos cultivados en comparación con la leche puede contribuir al efecto beneficioso de estos alimentos para las personas que tienen dificultades para digerir la lactosa. El efecto beneficioso también puede explicarse por la capacidad de los cultivos iniciadores utilizados en la fabricación de este producto.
- Equilibrar el intestino y mejora de la digestión. Sus probióticos pueden ayudar con varios problemas intestinos, como el síndrome del intestino irritable y úlceras. Además, ayudan a restaurar el equilibrio de bacterias saludables en el intestino.
- Mejora de la salud intestinal. Se ha demostrado que contiene cultivos vivos ayuda a mantener el equilibrio normal de la microflora intestinal y suprime las bacterias dañinas en el intestino. Puede ayudar en el tratamiento y la prevención de la diarrea asociada a los antibióticos, la diarrea del viajero y la diarrea aguda en los niños
- Efectos anticancerígenos y potenciadores del sistema inmunológico. Se cree que ciertos probióticos del kéfir protegen de las infecciones, inhibiendo el crecimiento de varias bacterias dañinas, incluyendo la Salmonella, Helicobacter pylori y E.Coli. Además, se cree que los probióticos en los productos lácteos fermentados reducen el crecimiento tumoral al estimular el sistema inmunitario.
- Mejora la salud ósea y reduce el riesgo de osteoporosis, gracias a su alta cantidad de calcio y vitamina K.
Kéfir vs. Yogur
El kéfir y el yogur son productos lácteos fermentados, pero no tienen los mismos beneficios para la salud. El kéfir contiene muchas más bacterias (pueden tener hasta 60), y muy diferentes entre ellas, y una mayor densidad de microorganismos. Así, se convierte en un probiótico mucho más poderoso que el yogur.
Por su parte, el yogur se produce por la acción de dos bacterias específicas: lactobacillus bulgaricus y streptococcus thermophilus. Una vez que la leche ha sido fermentada, la cantidad de bacterias vivas del yogur se reduce a la mínima expresión.
El yogur contiene bacterias beneficiosas transitorias que limpian el sistema digestivo y proporcionan alimento a las bacterias beneficiosas que residen allí. Pero las bacterias del kéfir pueden colonizar el tracto intestinal, una hazaña que el yogur no parece lograr.
A diferencia del yogur, el kéfir también contiene levaduras beneficiosas que ayudan a controlar y eliminar las levaduras patógenas destructivas en el cuerpo.
Dónde comprar kéfir
Si no nos atrevemos a crear nuestro propio kéfir, podemos consumirlo ya producido. Podemos comprarlo en supermercados convencionales. En España, hay kéfir de buena calidad y con opciones ecológicas en Carrefour, Lidl, Aldi, Eroski, Alcampo, supermercados El Corte Inglés y Mercadona. El kéfir de Mercadona no es ecológico, pero hay diferentes opciones de formato con diferentes sabores, unos más agrios que otros.
También podemos comprar kéfir en tiendas ecológicas de barrio, en Herbolario Navarrio, en Veritas y herbolarios.
Hoy en día es muy fácil encontrar kéfir en cualquier tienda o supermercado. Recomiendo probar varias marcas diferentes para conocer los diferentes sabores y texturas, y luego quedarnos con dos o tres para ir variando durante el mes.
Por qué es bueno desayunar kéfir
Desayunar kéfir es una buena opción para introducir este alimento en nuestro día a día. Mi receta favorita es tomar medio vaso de kéfir, o un bol pequeño, con semillas, frutos secos y fruta fresca de la semana.
En mi kéfir de desayuno utilizo los siguientes ingredientes:
- Medio vaso de kéfir
- Semillas de chía (una o dos cucharadas)
- Semillas de lino (una cucharada)
- Semillas de sésamo (una cucharada)
- Copos de avena finos (una cucharadita)
- Frutos secos: nueces de Brasil, avellanas, almendras, anacardos… (a gusto)
- Fruta fresca: uvas, arándanos, fresas, frambuesas, kiwi y/o medio plátano (a gusto)
Otras formas de tomarlo
El kéfir puede ser un complemento perfecto en una dieta saludable. Es muy fácil de incorporar en la rutina diaria. Ya sea casero o un producto comprado en una tienda de calidad, se puede usar en casi cualquier lugar donde se usaría la leche. Si no se quiere tomar el kéfir en el desayuno, se puede tomar también de la siguiente forma:
- A media mañana, con un bol con fruta, o a media tarde, con frutos secos
- En un batido con frutos rojos
- En salsas para ensaladas
- En bizcochos
- Bebido directamente de un vaso
- En un chia pudding, sustituyendo la leche de coco por el kéfir y dejando reposar en la nevera toda la noche
1 comentario
Muy interesante la información gracias